La muestra Farsites-Urban and Domestic Symptoms in Recent Contemporary Art (Sitios distantes -Síntomas urbanos y domésticos en el arte contemporáneo reciente) busca complementar BYPASS, el componente Intervenciones, curado por Osvaldo Sánchez, estableciendo así una conexión entre los proyectos públicos realizados en la región de San Diego y Tijuana y la propia exposición que tendrá lugar en estas dos ciudades. Partiendo del marco utilizado por Sánchez en BYPASS, Farsites retoma temas y conceptos afines con sus planteamientos, e incluye propuestas artísticas realizadas con distintas técnicas y medios por artistas contemporáneos que residen, en su mayoría, en el continente americano. Aun cuando las obras seleccionadas para esta exhibición pretenden establecer un vínculo con los tópicos y argumentos desarrollados en los proyectos públicos, no se relacionan de manera particular con la región San Diego-Tijuana, eludiendo así cualquier acercamiento específico de sitio.
“Al asumir que la ciudad es producto de flujos incontrolados, BYPASS tiene como objetivo destacar ciertas áreas a las que podríamos denominar urbanismo de lo informal. Hénos aquí, ocupándonos no sólo de la informalidad de los emplazamientos urbanos, de los servicios públicos o de los patrones de tránsito a través de la frontera, sino también de las dinámicas informales de la economía y el intercambio, del lenguaje y la codificación, del comportamiento y el sentido de pertenencia. El urbanismo de lo informal es la zona de impacto en donde se realizan apuestas acerca de lo que muestra el mapa y respecto a lo que omite, sobre lo que realza y aquello que vuelve invisible y silencioso. Esos espacios dúctiles y permeables, que funcionan como membranas o como lienzos porosos que filtran, contaminan y extienden los procesos mediante los cuales la identificación toma forma, constituyen ‘aquellos espacios de representación de lo que se considera social’ que han sido omitidos”, Pierre Bourdieu. Osvaldo Sánchez, BYPASS, inSite_05, marco conceptual preliminar. Las itálicas dentro del texto son del autor.
De esta manera, Farsites reúne, en un contexto museístico, un conjunto de obras que se refieren a los temas antes mencionados, pero que se relacionan con sitios distintos a la región San Diego-Tijuana. Además, si el componente Intervenciones, debido a su naturaleza procesual, es capaz de desarrollar proyectos que puedan referirse a cambios, flujos, corrientes y transformaciones, o de llevarlos a cabo, Farsites, al ser el componente más estático, necesariamente privilegia los objetos y evita documentar obras de arte de carácter procesual o aquellas que se realizan al exterior de los museos, ya que lo anterior, después de todo, es lo que se espera de Intervenciones.
Si el ámbito urbano contemporáneo fue considerado como punto central de nuestra investigación y reflexión, nuestro enfoque no se centra, sin embargo, en el paisaje o mapa de la ciudad como entidad totalizadora, así como tampoco en la integración de la retícula urbana con sus representaciones modernas y eficientes, sus sistemas, controles, corrientes y flujos, sino, más bien, en esos momentos o lugares en los que la retícula y los sistemas fallan o se frustran; éstos constituyen evidencias mínimas o fragmentos que, no obstante, continúan siendo relevantes como emblemas o síntomas. Todas las metrópolis se enfrentan a tales momentos y lugares, ya sea que se registren tanto en micro o macro niveles como en el ámbito privado o público. Así, en las ciudades consideradas del Tercer Mundo, esas circunstancias parecen más severas y evidentes, y surgen de manera cotidiana en sus calles, debido sencillamente a la carencia de recursos públicos disponibles para poder controlarlas en forma clara y eficiente, saneándolas o esterilizándolas. Sin embargo, tales circunstancias también se producen en las metrópolis de los países desarrollados, donde conservan su sorprendente y particular calidad, en especial debido al contexto en el que se generan, volviendo evidente lo inapropiado de los sistemas más modernos, más ricos y más desarrollados, en claro contraste con el ámbito público urbano.
Las obras de arte de esta exposición quizá reflejan, directa o indirectamente, un amplio espectro de comprensión de la crisis que se registra en los ámbitos públicos y urbanos, en los niveles económicos, políticos, institucionales, sociales, culturales y sistémicos. Por una parte, las obras de arte pueden apuntar al fracaso de los proyectos y deseos modernos, documentando y registrando tales instancias en forma crítica o en ocasiones articulando, de manera más propositiva, respuestas creativas a este tipo de situaciones adversas. Por otro lado, dichas obras tal vez surgen de una respuesta subjetiva o personal a las nociones de crisis, ofreciendo reflexiones aún más poéticas, que resultan de igual relevancia. En este sentido, la idea de crisis también debe ser entendida con un significado que va más allá de lo público y lo urbano. En dicha noción radica la importancia de los territorios privados, domésticos, personales y corporales que adquieren trascendencia al ser considerados como síntoma, reflexión, continuación, extensión o disrupción de la crisis en los ámbitos públicos y urbanos. Lo primordial en este caso es detectar los momentos y lugares en los que existe choque, colisión o fricciones entre la retícula urbana modernista y aquellas fuerzas y deseos impredecibles, imprevistos, incontrolables o inimaginables.
Estos momentos y ámbitos críticos han causado una preocupación creciente entre los artistas de todo el mundo y han incidido en su producción de diversas maneras. No obstante, las obras de arte que se generan en estas situaciones de crisis no pueden ser leídas como si se tratara de representaciones, documentaciones o investigaciones críticas o periodísticas sin sesgo alguno. En este contexto, la idea de síntoma adquiere relevancia, pues se entiende como un cambio o transformación en diversos estados, sean éstos físicos o mentales, concretos o contextuales, corporales o psicológicos. Debe quedar muy claro que la noción de síntoma, tal y como se asocia con las obras de arte, no habrá de ser considerada en forma única como efecto colateral o manifestación incontrolable, y aún menos como connotación terapéutica, sino más bien como una manifestación compleja y deliberada, como un pequeño fragmento de evidencia de una crisis mayor.
Además, Farsites incluye un componente documental importante, formado por cinco proyectos individuales relacionados con diversas comprensiones de la crisis que se registra en el terreno público y urbano, mismos que también se asocian con microniveles personales. Estos proyectos documentales fueron desarrollados por un grupo de cinco curadores adjuntos, quienes han realizado investigaciones en diferentes ciudades: Ana Elena Mallet con De la crisis perenne a la modernidad suspendida: El conjunto habitacional Nonoalco Tlatelolco (From Constant Crisis to Failed Modernity: The Nonoalco Tlatelolco Housing Project); Betti-Sue Hertz con Ciudad de Nueva York: Los apagones de 1965, 1977 y 2003 (New York City: Blackouts in 1965, 1977 and 2003); Carla Zaccagnini con São Paulo: Puentes, túneles y viaductos (São Paulo: Bridges, Tunnels and Viaducts); Julieta González con Caracas: Avenida Libertador, y Santiago García Navarro con Buenos Aires: Conjunto Palermo Viejo (Buenos Aires: The Palermo Viejo Assembly).
Estas metrópolis fueron seleccionadas como algunos de los mayores centros urbanos del continente americano, que en fecha reciente atravesaron por momentos de crisis y que se han constituido, por derecho propio, en núcleos culturales y artísticos de gran riqueza. Sin embargo, la selección de dichas urbes no debe tomarse como si se hubiera escogido a las más importantes de todas las que conforman este continente; podría haberse optado por Bogotá, La Habana, Los Ángeles, Miami, Río de Janeiro o Santiago, capitales que resultan igualmente complejas e interesantes. La elección de estas cinco ciudades debe tomarse como si se tratara de una constelación posible, entre las muchas otras que tienen la misma relevancia.
El componente documental de la muestra se caracteriza por un estudio que privilegia las búsquedas personales y las investigaciones en pequeña escala, haciendo referencia a la microhistoria, la Histoire des Annales o historia personal, más que a una extensa documentación de carácter panorámico. Los proyectos documentales se integran al entramado de la propia muestra, estableciendo conexiones con las obras de arte, reuniendo y organizando una esfera de materiales documentales –fotografías, recortes de prensa, documentos, literatura, filmes, videos y relatos personales– que representan los lugares y momentos de crisis ocurridos en localidades distantes. Aun cuando el componente documental de la exposición se enfoca en cinco metrópolis específicas, la instalación de Farsites en sí no asume el mismo criterio. De hecho, el concepto general de esta última evita fragmentar la muestra en grupos muy obvios o demasiado sencillos, es decir, congregar objetos y obras de arte en función de cada una de las cinco ciudades, dividirlos y agruparlos de acuerdo con la relación que tengan con lo urbano, lo arquitectónico, lo doméstico o lo personal, y aún menos separar las obras de arte de los proyectos documentales. El enfoque aplicado consistió en desarrollar diferentes estratos y niveles de lectura, mediante la yuxtaposición de las piezas y los proyectos documentales a lo largo de los espacios de exposición, entretejiendo temas, conceptos y orígenes, como lo urbano, lo arquitectónico, lo doméstico y lo personal, Buenos Aires, Caracas, la ciudad de México, Nueva York y São Paulo, entre otros sitios. Esperamos que el entramado de estas estrategias curatoriales y de sus múltiples estratos ofrezcan distintos accesos y abran numerosas trayectorias a lo largo de los espacios de exhibición, tanto en la sede de San Diego como en la de Tijuana.
— Adriano Pedrosa